Estos objetos, cuyo origen es todavía un enigma indescifrable para los científicos, ya que no se parecen en forma ni en material a otros hallados de épocas similares, fueron encontrados en una de las tres cámaras subterráneas ubicadas debajo del templo de la Serpiente Emplumada, en Teotihuacán. Investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), explicaron que las esferas tienen una antigüedad aproximada de 1.800 años, y que podrían haber sido utilizadas como ofrendas en rituales sagrados. Claro que no se parecen a ninguna otra ofrenda conocida hasta hoy; se trata de objetos metálicos en forma de esfera, con un diámetro de entre 4 y 12 centímetros con un núcleo de arcilla y otros materiales orgánicos. Numerosas hipótesis y teorías se han echado a correr acerca de la procedencia de estos objetos. Para algunos se trata de una nueva prueba de la presencia de tecnología extraterrestre en la cultura teotihuacana.
Por lo pronto, el robot desarrollado por el INAH, TlabocII-TC se encuentra recorriendo y tomando imágenes de las tres cámaras subterráneas y sus pasadizos, para encontrar respuestas a este interrogante, o tal vez nuevos enigmas.
Fuente: http://co.tuhistory.com
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