Considerado como uno de los petroglifos más impresionantes del planeta, el megalito de Al-Naslaa tiene una particularidad que lo hace único: aparece partido por la mitad con extrema precisión, como si se hubiese utilizado un láser para ello, lo que ha despertado el interés de los investigadores y del público en general.
Así es como esta gigantesca piedra prehistórica, ubicada en el desierto de Arabia Saudita, se ha convertido en uno de los mayores misterios hallados por el hombre. Desde su descubrimiento, la perfecta fragmentación de la roca ha despertado el interés de los investigadores y también ha provocado encendidos debates entre ellos al tratar la cuestión de si fue creada artificialmente o de forma natural.
Según expone la versión oficial, la hendidura de la roca surgió de manera natural. Según esta hipótesis, lo más probable es que el suelo se moviera ligeramente bajo uno de los dos soportes y la roca se partiese en dos mitades hace miles de años. Sin embargo, esta explicación no logra responder la siguiente pregunta ¿cómo acabaron situadas de manera totalmente paralela las dos mitades, tratándose de un corte perfectamente vertical y a la misma distancia?
Todo pareciera indicar que en algún momento del pasado la roca fue trabajada con herramientas extremadamente precisas. Algunas personas incluso se han aventurado a asegurar que para ello se utilizaron herramientas tipo láser. Pero ¿cómo iba a poder existir un láser en la prehistoria? Esta tecnología, la del láser, es aún muy reciente. Constituye una absoluta innovación incluso para nosotros, siglos y milenios después. Sin embargo, ¿cómo fue posible dividir un megalito de modo tan preciso, si no fue mediante el uso de la tecnología? Muchos han especulado sobre esto, pero hasta ahora nadie ha descubierto el verdadero origen de esta roca.
Los descubrimientos arqueológicos han demostrado que en la antigüedad la región donde se encuentra la roca estuvo habitada. Del mismo modo, otro enigma de esta piedra es que sobre ella se encuentran diversos grabados y símbolos de origen desconocido.
Registros históricos (y pre-históricos)
El megalito fue descubierto por Charles Huver en 1883. En el año 2010, la SCTH – Saudi Commission for Tourism & National Heritage (“Comisión Saudí para el Turismo y el Patrimonio Histórico Nacional”), anunció el descubrimiento de una roca cerca de Tayma con una inscripción jeroglífica del faraón Ramsés III. Sobre la base de este hallazgo, algunos investigadores han planteado la hipótesis de que Tayma formara parte de una importante ruta terrestre que habría unido en el pasado la costa del mar Rojo de la península arábiga y el valle del Nilo.
Algunos de los dibujos que aparecen grabados sobre la extraña roca.
Asimismo, en el lugar donde se encuentra la roca también se han realizado numerosos descubrimientos arqueológicos, y se trata de un emplazamiento con una historia muy rica. Del mismo modo, según DiscloseTV recientes descubrimientos arqueológicos demuestran que Tayma ha estado habitada desde la Edad del Bronce. Según los informes, la mención más antigua de la ciudad del oasis aparece como “Tiamat” en inscripciones asirias que datan del siglo VIII a. C.
Herramientas del pasado
El corte extremadamente preciso que divide los dos fragmentos de roca ha planteado más preguntas que respuestas. Tanto es así que en muchos intrépidos científicos sigue latente la idea de que el corte del megalito de Al-Naslaa fue producido por una tecnología desconocida.
Sin embargo, muchos otros tratan de explicarlo como un fenómeno natural, a pesar de que a través del tiempo se han podido recopilar experiencias previas que indican que las civilizaciones prehistóricas sobre la Tierra poseían conocimientos tecnológicos avanzados que se perdieron a través del tiempo, aunque sólo para ser redescubiertos en los tiempos modernos
Autor: Celeste Caminos – La Gran Época
Articulo publicado en...https://www.ancient-origins.es/fenomenos-inexplicables/roca-partida-por-la-mitad-004279
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