Buscar este blog

sábado, 25 de marzo de 2017

RUINAS SUBMARINAS DE YONAGUNI

Resultado de imagen de ciudad sumergida de yonaguni

Planeta azul se hace presente nuevamente en esta oportunidad en la recóndita región del mar de china, donde durante una inspección submarina rutinaria en los alrededores de la isla de Yonaguni (colindante con Taiwán) científicos del Centro Geológico de la Universidad de Ryukyu en Okinawa, se toparon con una estructura que se encuentra a unos 200 metros de la región de Arakawabana, y que no parece ser producto de la naturaleza, sino que se le atribuye a la intervención de la mano del hombre.
Se trata de una estructura de 120 m. de largo, 40 m. de ancho y 20 m. de alto. Aparentemente se trata de un tramo de escaleras, con dos orificios de unos 90 cms. de diámetro y 1 metro de profundidad que se cree eran para colocar dos pilares hechos de madera.
Los científicos aseguraron que esta obra fue realizada por la mano del hombre y de ninguna manera por alguna erosión volcánica, como se pensó en un principio.
Las ruinas encontradas datan de entre 4.000 o 10.000 años atrás, y que la construcción es muy similar a la de la cultura Ryukyu, una fortificación sumergida hace muchos años descubierta en 1.995, situada en la costa sur de la isla Yonaguni, localizada al este de Taiwán y al oeste de las islas Iriomote, en el mar de China.
A estas ruinas se las quiere catalogar como el Edificio más antiguo del Mundo. De hecho, posee la forma de un Zigurat, y geológicamente ha podido ser fechada alrededor del 8.000 AC., lo que la convertiría en uno de los más importantes descubrimientos arqueológicos de los últimos 50 años.
En recientes exploraciones acuáticas, usando robots, análisis simples de rocas, y una serie de observaciones subacuáticas tripuladas y no tripuladas, fueron descubiertos una serie de puentes de tierra que conectan el archipiélago de pequeñas islas de Ryukyu con las tierras del continente de China (dichos puentes se hundieron debido a una serie de cambios geológicos), así como una serie de formaciones topográficas únicas, las cuales pueden haber sido parte de antiguos templos o pequeñas pirámides.
El último puente de tierra que conecta las islas con China puede haber aparecido durante el último período glacial a fines del Pleistoceno, conectando una serie de importantes islas a través de Taiwán, Okinawa y Amani Oshime, con el área de Kyushu.
En Junio de 1.998 se realizaron una serie de filmaciones de estas estructuras rocosas, una de las cuales muestra una enorme formación piramidal de 80 m. de largo cerca de la isla de Yonaguni. Algunas estructuras tienen 25 metros de alto, y tienen ángulos rectos perfectos y escaleras enclavadas en la roca. Otras se encuentran a sólo 10 metros de la superficie de las aguas.
La estructura principal presenta ángulos casi rectos y bordes o esquinas bien determinadas que difícilmente pueden considerarse naturales y que se encuentran a lo largo de 5 Km. de la costa sur de Yonaguni.
El hecho de que las ruinas se encuentren sumergidas, y en el caso que las estructuras no sean de origen geológico, estas tuvieron que ser talladas cuando el monumento se encontraba sobre el agua, es decir, en la época glaciar, cuando los niveles del mar eran mucho más bajos debido a que la mayor parte del agua se encontraba congelada en el hemisferio norte.
Esto quiere decir que la última vez que el monumento de Yonaguni se encontraba fuera del agua, y por tanto construido, fue sobre el año 8.000 AC, unos 5.000 años más antiguas que las pirámides de Egipto.
Pero afirmar esto es ir en contra de la cronología actual, oficialmente aceptada por la arqueología y de la historia universal oficial establecida por el gobierno mundial. Estas enormes construcciones requieren un nivel de organización y planificación de la sociedad tal, que los historiadores no aceptan que pudiera existir hace 10.000 años. Por lo tanto, si se prueba que estas formaciones fueron realizadas por el hombre y que tienen unos 10.000 años, tendremos que revisar la historia universal y la cronología arqueológica actual.
Estas estructuras sumergidas parecen dar sustento a las leyendas de una civilización prehistórica en el Océano Pacífico llamada Lemuria o Mu. Los japoneses llamaban a sus emperadores prehistóricos Jim Mu, Tim Mu, Kam Mu, entre otros, lo que quizá significa que sus ancestros fueran supervivientes de esta civilización. En el norte de Japón hay un importante río llamado Mu.
El profesor y arqueólogo Eiji Ikeda, dijo en una oportunidad que no ha visitado personalmente las ruinas encontradas, pero que considera que no pueden pertenecer a la cultura de Ryukyu, ya que ésta es mucho más reciente a la fecha dada por los descubridores de esa estructura. Aunque matizó que se deben hacer investigaciones adicionales para probar que hubo intervención de la mano del hombre, ya que hasta el momento no se han encontrado herramientas de ninguna clase o restos humanos, ni siquiera inscripciones que den pautas de su antigüedad o procedencia.
Estas Ruinas masivas cubren un área que abarca más de 45.000 metros cuadrados.
Lo más probable es que fuera sumergida debido a un desastre, como un gran terremoto y posterior tsunami
Si nos preguntamos ¿Dónde podemos encontrar pirámides aparte de las de Egipto? Tal vez podíamos hablar de las pirámides incas en el Perú, las pirámides de Nubia (Sudán), o las pirámides en ruinas de la antigua Mesopotamia (Irak) y Persia (Irán), conocidos como zigurats.
Y lo que es importante resaltar es que la lista se amplió en 1987, cuando el tour operador de buceo Kihachiro Aratake descubrió una estructura de piedra en Japón, frente a la isla Yonaguni, al sur de Okinawa.
Esta pirámide en terrazas parece haber sido creada utilizando mano de obra calificada y tecnología avanzada, perteneciente a la prehistoria. No atrajo mucha atención hasta que expertos y aventureros se sumergieron en repetidas ocasiones en el sitio, fotografiando y sacando a la luz esta impresionante estructura de características diversas.
El Dr. Masaaki Kimura, un geólogo marino de la Universidad de Ryukyu, ha buceado allí durante más de 18 años para medir y mapear las características del Monumento Yonaguni, como se ha dado en llamar. La estructura consta de una enorme red de edificios, incluyendo castillos, monumentos y un estadio, todos conectados por un sistema elaborado de lo que parecen ser carreteras y vías fluviales.
Lo más probable es que fuera sumergida debido a un desastre, como un gran terremoto y posterior tsunami. Japón se encuentra en la región de gran inestabilidad tectónica del Anillo de Fuego del Pacífico. Fuertes terremotos son muy comunes en esta área.
El tsunami más grande del mundo registrado golpeó Yonaguni en 1771 con una altura estimada de más de 131 pies (40 metros). Tal evento puede haber ocurrido también durante la antigua civilización asociada a esta estructura.
Kimura presentó su investigación y un modelo generado por ordenador de las ruinas arqueológicas del sitio en una conferencia científica en Japón en 2007. Según Kimura, hay 10 estructuras sumergidas en Yonaguni, y otras cinco estructuras similares en la isla principal de Okinawa.
Ruinas masivas cubren un área que abarca más de 48.400 pies cuadrados (alrededor de 45.000 metros cuadrados). Kimura cree que las ruinas datan de al menos 5.000 años, en base a la edad de las estalactitas encontradas en cuevas submarinas que se cree se hundieron con la ciudad.
De hecho, hay muchas cuevas con estalactitas en las aguas de Okinawa. Estalactitas y estalagmitas sólo se pueden formar por encima del agua durante un proceso extremadamente lento. Cuevas con estalactitas sumergidas encontradas alrededor de Okinawa indican que gran parte del área estuvo fuera del agua al mismo tiempo.
“La estructura más grande se parece a una compleja y monolítica pirámide, se eleva desde una profundidad de 25 metros [82 pies]”, dijo Kimura en una entrevista en 2007.
Con los años, ha creado una imagen detallada de este antiguo sitio y ha encontrado muchas similitudes entre las estructuras bajo el agua y sitios arqueológicos en tierra.
Por ejemplo, un recorte semicircular en una plataforma de roca coincide con una entrada del castillo en ruinas en tierra. El Castillo de Nakagusuku en Okinawa tiene una entrada perfectamente semicircular típica de los gusuku (castillos) de la dinastía Ryukyu del siglo XIII.
Dos piedras erguidas bajo el agua como enormes megalitos de 6 metros de altura, situados en posición vertical junto a otra pirámide, también tienen similitudes con megalitos hermanados en otras partes de Japón, como el Monte Nabeyama en la Prefectura de Gifu.
Sin embargo, muchos “expertos investigadores” que apoyan a la ciencia oficial sostienen que todas las estructuras son formaciones naturales formadas por la acción de las olas en las rocas durante miles de años. Por supuesto no podía esperarse otra cosa al respecto
El geólogo Robert M. Schoch de la Universidad de Boston, conocido por su trabajo en la re-datación de la Esfinge a una edad mucho más temprana, ha variado en su opinión sobre las estructuras de Yonaguni. Al principio, pensó que las plataformas y estructuras en forma de terraza, eran formaciones completamente naturales después de hacer una serie de inmersiones en el lugar.
Schoch tomó algunas muestras de rocas y el análisis mostró que eran de barro y areniscas formadas durante el llamado Mioceno Inferior Grupo Yaeyama, que fue depositado hace unos 20 millones de años.
Kimura reconoce que la estructura de la roca básica es natural, pero afirma que ha sido “terraformada” por los seres humanos. Por ejemplo, dos pares grandes de pasos de la “terraza principal” a la “terraza superior” son difíciles de explicar por las fuerzas erosivas naturales.
Kimura también señala que no se encuentran escombros y bloques perdidos en la base de muchas de las estructuras, o en los canales excavados en la roca, lo que se esperaría si hubieran sido producidas por la erosión natural.
Después de inmersiones más tardías, Schoch está de acuerdo en que: “También debemos considerar la posibilidad de que el Monumento Yonaguni es fundamentalmente una estructura natural que fue utilizada, aumentada y modificada en la antigüedad por el hombre”, escribió en un artículo publicado en 1999.
Antiguas y modernas civilizaciones han utilizado formaciones rocosas naturales para una variedad de propósitos. El mejor ejemplo es la Gran Esfinge de Giza en Egipto que está excavada en la “roca viva”; otros son los templos de Petra en Jordania y en Mahabalipuram en la India del sur.
Se han descubierto muchas estructuras e investigadores y buzos siguen explorando. Una tiene la forma de una estatua sedente, similar a la Esfinge.
“Un ejemplo que he descrito como una esfinge bajo el agua se asemeja a un antiguo rey chino de Okinawa”, dijo Kimura.
Esta enigmática estructura tallada que ahora se llama “la roca de la diosa”, fue descubierta a una profundidad de unos 50 pies. Mirando de cerca, se puede divisar un casco y largos brazos como los de la Esfinge de Egipto.
También se descubrió una piedra grande y redonda que se asemeja a un rostro humano. En una tradición similar a las figuras “Moai” de la Isla de Pascua de Chile, esta gigantesca cabeza está apoyada en el suelo, tal vez mirando a un horizonte lejano. Algunos creen que esta figura constituye un eje virtual o un punto focal. Alternativamente, podría ser un legendario gigante Atlas que glorificaba esta ciudad perdida.
Buzos y varios investigadores han señalado pequeñas tallas en las superficies de piedra alrededor del monumento, y algunos han pretendido ver animales tallados en las rocas.
Tablas de piedra, recuperadas de la vecindad, una conocida como el “la piedra Rosseta de Okinawa”, están grabadas con símbolos que son similares a los jeroglíficos egipcios. El mensaje no ha sido descifrado, pero podría ser la historia de la ciudad perdida ya que el símbolo de la pirámide está grabado en repetidas ocasiones.
Herramientas de piedra han sido también recuperadas de las aguas cercanas.
La pirámide submarina y otras reliquias descubiertas en Yonaguni pueden ofrecer pruebas tentadoras de una sofisticada civilización que existió durante la última edad de hielo.
La mayoría de los arqueólogos creen que la civilización humana surgió hace unos 5.000 años, pero un número pequeño pero persuasivo de expertos piensan que pueden haber existido sociedades “avanzadas” desde hace 10.000 años y fueron eliminadas por algún tipo de catástrofes o avanzadas civilizaciones extraterrestres que tuvieron que abandonar la tierra debido tal vez a lo dramáticos efectos climáticos y geológicos de las glaciaciones.

















RECOPILACON INVESTIGATIVA: ING. REYNALDO PEREZ MONAGAS.

articulo publicado en...https://rey55.wordpress.com/

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.