Oak Island tiene un misterio que ha desafiado la ambición de los cazadores de tesoros durante más de 200 años.
Oak Island es una pequeña isla, ubicada en el condado de Lunenbuklirg, en el sur de Nueva Escocia - Canadá. Según el mito, un antiguo tesoro ha sido abandonado allí por los templarios españoles.
Muchos creen que allí, además de una riqueza increíble, se encuentran los escritos originales de William Shakespeare.
El tesoro de Oak Island 'oficialmente' comenzó en 1795, cuando Daniel McGinnis, un adolescente de 16 años, descubrió un hueco circular en el extremo sur de la isla junto a un árbol que tenía marcas de izada en una de sus ramas.
McGinnis y sus amigos, John Smith (en otras historias, Samuel Ball) y Anthony Vaughan, cavaron en el agujero y encontraron una capa de losas de 30 cm de profundidad.
En las paredes del pozo, había claras marcas de picos. Continuaron excavando y encontraron una capa de troncos a 3 metros por debajo de la superficie. Abandonaron la excavación después de alcanzar una profundidad de alrededor de diez metros.
Alrededor de ocho años después de la excavación de 1795, según los artículos y memorias originales de Vaughan, una compañía examinó el pozo.
The Onslow Company viajó 300 millas náuticas (560 km) desde el corazón de Nueva Escocia, cerca de Truro, a la isla para recuperar el presunto tesoro enterrado en Oak Island.
Continuaron cavando a una profundidad de alrededor de 27.43 my encontraron más troncos y "marcas" cada 3 metros, así como capas de carbón, masilla y fibra de coco a 12, 15 y 18 metros respectivamente.
Según una de las primeras versiones escritas, a una profundidad de alrededor de 27 metros, los cazadores de tesoros de la Compañía Onslow encontraron una piedra plana con un conjunto de misteriosos símbolos escritos en su superficie.
Aparentemente, alguien logró traducir las supuestas esculturas que dicen "14 pies abajo, 2,000,000 libras [esterlinas] están enterradas".
No hay imágenes o dibujos de la piedra y sus símbolos, y la piedra supuestamente desapareció en 1912.
Sin embargo, los símbolos asociados con esta traducción aparecen en el libro True Tales of Buried Treasure, del explorador e historiador Edward Rowe Snow, en 1951.
En ese libro, afirma que el reverendo AT Kempton de Cambridge, Massachusetts, le entregó una copia de los símbolos de registro.
Nada más se sabía de Kempton después de eso.
Posteriormente, el pozo se inundó a una profundidad de 10 my el nivel del agua no pudo reducirse, por lo que la excavación fue abandonada.
Investigadores de la antigua Compañía Truro, en 1849, continuaron excavando hasta 26 m de profundidad, produciendo otra inundación y continuaron perforando.
Según una cuenta del siglo XIX, la perforación pasó por una plataforma de madera a una profundidad de alrededor de 30 metros. Continuaron cavando pero no encontraron nada más que pedazos de metal y fragmentos de madera.
También se dice que se han encontrado cantidades abundantes de huesos humanos y fibras de coco.
Recientemente, la obsesión de Oak Island conquistó a dos hermanos de Michigan; Rick y Marty Lagina, que compraron gran parte de la isla para desvelar el tesoro de las islas.
Encontrar el tesoro escondido fue la obsesión de muchos: ingenieros, mineros e incluso el presidente Franklin Roosevelt.
Sin embargo, nadie ha logrado descubrir ningún tesoro allí todavía.
Lamentablemente, muchas personas incluso han muerto tratando de encontrar ese tesoro que supuestamente descansa en algún lugar de la isla, a unos 60 metros debajo de la superficie.
Mientras tanto, mientras más cazadores de tesoros cavan, los agujeros subterráneos se inundan debido a un sistema de canales que existen en la isla, complicando aún más la ya peligrosa tarea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.