He tenido afinidad con la civilización maya durante casi 30 años, y entre el trabajo con los ancianos nativos, las vacaciones y las visitas guiadas grupales a México, puedo dar fe de la naturaleza mística de esta gente. Es fácil ver por qué los programas de televisión como Ancient Aliens se sienten atraídos por los mayas; representan una desviación completa de las normas que asociamos con una cultura antigua. Los griegos, romanos y babilonios nos dejaron registros escritos de su sociedad, lo que pensaban en ese momento y descripciones de sus actividades diarias. Solo tenemos fragmentos de información sobre el estilo de vida maya y nada sobre por qué eligieron construir pirámides, sus intereses en la astronomía y muchos otros temas que parecían haber consumido a sus científicos, la élite gobernante y los chamanes.
Desafortunadamente, durante más de cien años, arqueólogos patrocinados por universidades nos han alimentado con una historia de los mayas, quienes (sin razón) optaron por ignorar a los descendientes vivos de esta civilización, quienes hasta el día de hoy, todavía practican las ciencias sagradas transmitidos por sus antepasados. Esta práctica desastrosa ha llevado a grandes interpretaciones erróneas, verdades a medias y teorías, dañando nuestra comprensión de los mayas.
Buscando la verdad
De 1995 a 2010, pasé mis veranos en presencia de un chamán/guardián maya, quien describió una versión completamente diferente de sus antepasados, su forma de vida y cómo percibían el mundo. Pocas personas se dan cuenta de que existe un período temprano (las primeras personas) o una civilización pre-maya que data del año 6000 a. C., y muestra todos los indicios de ser significativamente más antigua. Por lo que he aprendido, ahora parece que los mayas del período Clásico heredaron gran parte (si no todo) de su conocimiento de estos pueblos primitivos, quienes desarrollaron un lenguaje y una ciencia únicos y aún sin descifrar. Tan fantástico como suena, la cultura pre-maya puede haber tenido sus comienzos en la época del Pleistoceno.
Oxkintok, Yucatán, México, copia digital de estampa. (Gary Todd / Dominio público)
Las ruinas de Oxkintok (Osh-kin-took), que significa "la ciudad de los tres soles cortantes", se encuentran aproximadamente a 60 millas (66,6 km) al sur de Mérida, la capital de Yucatán, México. Leímos por primera vez sobre la ciudad en 1839 en el popular libro "Incidents of Travel Yucatan" del escritor explorador y su compañero artista, John Stephen y Fredrick Catherwood. Mi primera visita a Oxkintok fue reveladora. Además de los restos de algunos edificios, la mayor parte del cívico (área de reunión central) fue arrasada, aplastada por alguna fuerza masiva. Todo lo que quedó fueron montones de piedras. (Vemos lo mismo en toda la península de Yucatán en México, donde parece haber grandes masas de agua que pulverizaron la mayoría de estas ciudades). En mi investigación en curso sobre las ciudades mayas en Yucatán, encontré varios estudios geológicos que indican inundaciones masivas y buena evidencia de tsunamis gigantes durante miles de años.
Aunque soy cauteloso de no escribir que el daño de los tsunamis es obra de una inundación bíblica (9500 a. C.), es un hecho que volúmenes sustanciales de agua pasaron continuamente sobre la península de Yucatán y se asentaron durante largos períodos.
Artefactos fuera de lugar
Situado en un pequeño patio justo al norte del centro de la ciudad, se han restaurado los fragmentos de un pequeño templo con columnas. Una fotografía temprana (foto A abajo), tomada a principios de siglo, muestra columnas inusuales con figuras, parcialmente expuestas en sedimentos. Las columnas con figuras no son infrecuentes en el diseño maya clásico y la mayoría están talladas en relieve (insertadas desde la superficie), pero lo que vemos en Oxkintok está completamente fuera de lo normal.
Foto A, foto antigua de columnas de piedra tallada en Oxkintok. (Proporcionado por el autor)
De las dos estatuas que se presentan aquí, la “Columna 2”, grande y con vestimenta distintiva, se ha trasladado al Museo Antropológico de la Ciudad de México, y la otra, “Cabeza de robot”, se puede ver en el Museo de Historia Natural de Mérida. Comprenderá por qué nombré a la segunda figura, Robot-head en breve. Ambos usan armadura o ropa protectora y pueden representar a soldados, guardias o gente común con trajes protectores. La columna 2 también puede representar una figura pre-maya destacada (militar), ya que se encuentran reproducciones idénticas del tamaño de estatuillas en museos de todo México.
Fotos C y D de la figura de piedra de la columna 2 de Oxkintok, ahora en el Museo Antropológico de la Ciudad de México. (Proporcionado por el autor)
La columna 2 (fotos B, C, D) es un hombre barrigón intrincadamente tallado, con armadura completa, que lleva un alto e impresionante tocado tolteca. Descubierta en pedazos, los arqueólogos no están seguros de dónde se colocó la estatua, qué representa y si la armadura era de cuero, metal u otro material.
Foto B que muestra el collar con la mano al revés en la figura de piedra de la Columna 2 de Oxkintok. (Proporcionado por el autor)
Primeros planos de la cara (foto B), muestran una apariencia bulbosa y protuberante de dibujos animados, con lo que parecen gafas protectoras para los ojos y tal vez una máscara facial parcial. Su ceño fruncido hostil puede ser un impedimento, lo que sugiere un guardia. Además, lleva un collar con una mano al revés como adorno, un símbolo que los arqueólogos no entienden. Este collar aparece en numerosas estatuillas y estatuas, y creo que simboliza una asociación grupal. Hace unos años, entrevisté a un investigador de campo que rastreó el símbolo hasta el mítico continente de la Atlántida. Ella afirmó que la mano era atlante y representaba a los Hijos de la Ley del Uno, una de las dos facciones (partidos políticos) descritas en detalle por Edgar Cayce, en sus lecturas.
El escultor tuvo cuidado de tallar la mano derecha de la Columna 2, con la palma hacia arriba y hacia adelante. En las antiguas tradiciones hindúes y budistas, este gesto es el Abhaya Mudrā, una forma de eliminar el miedo de tu mente. Abhaya mudra tiene un significado significativo. La palabra Abhaya es sánscrito para "sin miedo". Sin embargo, esto no es miedo en el sentido moderno. Es el miedo que incluye estrés, ansiedades, preocupaciones, etc. El gesto es antiguo y tiene un claro significado de lenguaje corporal. Al mostrar que la mano está vacía, el individuo muestra la amistad y la paz. Se dice que este es el gesto que hizo Buda después de encontrar la iluminación. El Buda volvió a utilizar el gesto cuando estaba a punto de ser atacado por un elefante. Cuando Buda vio que el animal atacaba, sostuvo sus manos en este gesto y el animal se detuvo.
Primer plano de la mano izquierda de la figura de piedra de la Columna 2. (Proporcionado por el autor)
La mano izquierda agarra un mango (control) que conduce a un dispositivo o engranaje en forma de estrella. ¿Qué representa el escultor aquí? Sin ninguna referencia, todo apunta a la tecnología en una forma que no hemos encontrado en el arte maya. ¿Es esta una palanca para operar un dispositivo o una máquina? ¿Quién es este hombre? ¿El sobreviviente de una gran guerra, un místico protector del pueblo? Me acuerdo de otro artefacto fuera de lugar que encontré hace unos años, en la Ciudad de México, en el Museo Antropológico Nacional.
Artefacto en el Museo Antropológico Nacional, Ciudad de México. (Proporcionado por el autor)
Aquí, la figura está vestida con un traje protector holgado y una máscara ornamentada, de pie contra una columna. La mano izquierda está agarrando un brazo de control o de maniobra para guiar algo, pero ¿qué? En la parte superior del casco, podemos ver las llamas de algún cohete rudimentario mientras se eleva del suelo. ¿La figura está operando un cohete autopropulsado?
Se estima que la figura tiene más de 1.000 años y puede representar un recuerdo, una fábula o un mito del pasado. ¿La figura de la Columna 2 conduce una versión similar de esta embarcación? Por ahora, solo podemos adivinar. Desafortunadamente, los arqueólogos no están dispuestos a considerar esta valiosa evidencia de un pasado tecnológico. Creo que una vez que hayamos descifrado el collar de la Columna 2, tendremos nuestra respuesta a lo que se representa en esta fascinante escultura.
La figura de la 'cabeza de robot'
Figura de piedra 'Cabeza de robot', ahora en el Museo de Historia Natural de Mérida. (Proporcionado por el autor)
La segunda estatua, “Cabeza de robot”, tiene una calavera con forma de robot de juguete de los años 50, con una gran cabeza cuadrada, ojos rectangulares que sobresalen, orejas extendidas y una boca angular. Aquí nuevamente, vemos una figura barrigona con armadura completa con algunas diferencias notables.
Una gran forma circular sobresale de su sección media y está unida a una correa de soporte asegurada a la columna. El brazo derecho está doblado y la mano agarra un control conectado a otro objeto en forma de estrella. Falta una gran parte del brazo derecho levantado, pero la muñeca y la mano cerrada aún son visibles.
Primer plano del torso de la figura de la cabeza del robot. (Proporcionado por el autor)
Aunque varias áreas de la figura están mal concebidas y partes de la cara están dañadas, la estatua se destaca como extraña, sin otros ejemplos. Tal vez estemos ante una figura con un extraño casco protector, un soldado encargado de manipular líquidos combustibles o explosivos. Artículos posteriores y un próximo libro describen mi creencia de que los mayas fueron parte de una gran guerra por la Tierra, conocida en los Vedas hindúes como las Guerras del Mahabharata. Esta estatua puede representar a un soldado de esta batalla.
No hay referencias para la Columna 2 o las estatuas de cabezas de robot, lo que me lleva a preguntarme quiénes son y qué período histórico representan. Desafortunadamente, estas preguntas están completamente fuera del contexto de las narrativas históricas y arqueológicas actuales, que parecen estar luchando con la creciente evidencia de que la antigua cultura mesoamericana tuvo un pasado tecnológico.
Creo que estas figuras y la ciudad de Oxkintok son de un período olvidado en la historia de la Tierra y estaban en ruinas cuando los mayas del período Clásico reubicaron el área hace unos miles de años. Existe una buena posibilidad de que los escaneos Lidar, combinados con tecnología de penetración terrestre dirigida, descubran muchas de las preguntas sin respuesta que buscamos.
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