La forma en que las antiguas civilizaciones construyeron algunos de los monumentos más increíbles que vemos hoy sigue siendo uno de los más grandes misterios arqueológicos del siglo XXI. No solo es un misterio cómo se logró crear tales estructuras, sino cómo lograron extraer, transportar y colocar rocas gigantes juntas con gran precisión, es algo que ni siquiera los ingenieros de hoy pueden imaginar.
Uno de esos monumentos arquitectónicos es el templo de Kailasa, que se encuentra en Ellora, Maharashtra, en la India. Dedicado al dios hindú Shiva, el templo entero fue construido usando una técnica que no se ha visto en ningún otro lugar del mundo.
A diferencia de otras antiguas estructuras megalíticas que fueron construidas uniendo rocas de distinto tamaño, este templo en sí fue construido de una sola roca. Este tiene una altura de 30 metros, 33 metros de ancho y una profundidad de 50 metros, y es solo uno de los 34 monasterios y templos que se extienden sobre un área de 2 kilómetros.
El templo también está perfectamente alineado con los puntos cardinales, con la entrada alineada con el oeste.
Los académicos creen que el templo fue tallado alrededor del año 300 a.C., pero los teóricos de los antiguos astronautas sugieren que podría ser mucho más antigua.
Algunos historiadores estiman que la construcción del templo requirió la remoción de más de 400000 toneladas de roca, pero aún más increíble es que los arqueólogos de la corriente principal proponen que esta hazaña se realizó en solo 18 años, utilizando herramientas simples como cinceles y martillos.
El templo también está perfectamente alineado con los puntos cardinales, con la entrada alineada con el oeste.
Los académicos creen que el templo fue tallado alrededor del año 300 a.C., pero los teóricos de los antiguos astronautas sugieren que podría ser mucho más antigua.
Algunos historiadores estiman que la construcción del templo requirió la remoción de más de 400000 toneladas de roca, pero aún más increíble es que los arqueólogos de la corriente principal proponen que esta hazaña se realizó en solo 18 años, utilizando herramientas simples como cinceles y martillos.
Si las personas trabajaron todos los días durante esos 18 años, durante 12 horas seguidas sin interrupciones, tendrían que haber retirado cinco toneladas de roca cada hora. Realmente, tal hazaña ni siquiera es posible hoy en día con la tecnología moderna.
Si sucedió en 18 años, es muy difícil dar cuenta de otro hecho sorprendente. Y es que si se eliminan 400000 toneladas de rocas, tienen que ser desechadas en algún lugar.
Pero no se han hallado evidencias de rocas apiladas cerca del lugar, o que hayan sido utilizadas para construir otros templos o cualquier otra estructura.
Entonces, ¿A dónde se fue toda esa gran cantidad de rocas? ¿Podrían los humanos que vivieron hace más de 1000 años realmente haber construido el Templo Kailasa en solo 18 años? Y si es así, ¿cómo es que toda la roca excavada simplemente desapareció?
Quizás se pueden encontrar más pistas al examinar un dispositivo poderoso descrito en los antiguos textos védicos.
Los antiguos textos védicos mencionan un dispositivo llamado Bhaumastra, que era una máquina de alta tecnología que podía perforar rápidamente la roca, y vaporizarlos. Esto podía básicamente convertir la roca en aire.
¿Podría ser así como se construyó el Templo de Kailasa? ¿Es posible que la máquina Bhaumastra descrita en los textos védicos fuera realmente un dispositivo tecnológico que existió en la Tierra hace miles de años?
Esto hace pensar a los teóricos de los Antiguos Astronautas que esta, y las otras estructuras similares en el área, no fueron hechos por los primitivos humanos, ya que idealmente deberían haber tardado siglos en construirse, dada la falta de capacidad tecnológica en ese entonces.
Sino que fue hecha por seres más avanzados, que los locales los consideraban como dioses, utilizando la exótica tecnología para poder tallar tal estructura de una sola pieza.
¿Fue el templo de Kailasa hecho enteramente por seres humanos con una rapidez y perfección solo utilizando cinceles y martillos, como afirma la ciencia convencional, o en su construcción hubo la intervención de una maquina hasta ahora no conocida por la humanidad, probablemente proveniente de otro mundo.?
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